Descubre la ciudad medieval de Tallin
Enrique Lopez
- febrero 10, 2025
- 5 Min Read

La primera vez que llegué a Tallin, era una mañana de finales de septiembre hace más de veinte años, llegamos con un crucero proveniente de Estocolmo y con destino Helsinki, Tallin era una preciosa ciudad medieval que estaba empezando a adaptarse al turismo europeo, hoy en día es una ciudad animada bulliciosa, pero al mismo tiempo tranquila ciudad y que bien merece una escala para visitarla.
Tallin es una ciudad muy fotogénica, no en vano en su historia ha sido, danesa, sueca, polaca, alemana y rusa y todo eso deja un poso cultural y arquitectónico espectacular. Esta repleta de lugares para visitar y calles preciosas por donde pasear, iglesias ortodoxas, grandes mansiones, calles medievales empedradas, es una de las ciudades amuralladas más grandes de Europa y por algo es una ciudad Patrimonio de la Humanidad.
👀 Qué ver en Tallin
Casco Antiguo
La ciudad vieja de Tallin (Vanalinn) es sin duda la zona urbana más atractiva de la ciudad, se divide en Toompea (ciudad alta) y la ciudad vieja rodeada de sus 2,5Km de muralla que la protegen. Toompea es una antigua ciudadela que desde lo alto domina el resto de la ciudad, en la época alemana era la zona señorial, ahora es donde residen la mayoría de los edificios gubernamentales, iglesias, embajadas, etc.
Allí no te puedes perder la Catedral Ortodoxa de Alejandro Nevski , fue terminada a finales de 1900 en época rusa en época de los zares, es una catedral donde se permite las visitas, pero no las fotografías, hay que tener especial cuidado en los momentos de culto.
Otra visita que se debe de realizar es la Catedral Luterana de Santa Maria, en 1223 los daneses iniciaron su construcción, aunque no se terminó hasta 1779, aquí se enterraban a los ricos y nobles, por lo que podréis ver estupendos escudos de armas de la nobleza estonia. Aunque la catedral ahora es luteranismos, en sus comienzos fue católica. Si estás en buena forma, puedes visitar su torre para ver las vistas.


Ciudad Baja
En la Ciudad baja, disfruta de paseos por las empedradas calles que le dan el aire medieval que tiene, incluso verás que muchos de los trabajadores de las tiendas y cafeterías, llevan atuendo antiguos para no no desentonar.
La calle más comercial es la Calle Pikk, que empieza en la Gran Puerta de la Costa y alberga los edificios históricos de los gremios.
En la Ciudad Baja encontraréis el Ayuntamiento de Tallin, terminado en 1404 y es el único ayuntamiento gótico que hay en Europa, en su interior puede visitarse, al Cámara de Comercio, la Sala del Consejo y la Sala de los Ciudadanos con sus grandes bóvedas, y otras dependencias.
La Plaza del Ayuntamiento, es el corazón de la ciudad, casi todas las calles desembocan en ella, no olvides llevarte la cámara o el teléfono para llevarte unos buenos recuerdos, es una plaza con unos edificios muy bonitos de entre el siglo XV y XVII.
Especial atención hay que tener en la Farmacia del Ayuntamiento, es la farmacia que más tiempo lleva funcionando ininterrumpidamente de Europa, ya en 1422 llevaba tres propietarios, aunque no se sabe exactamente cuando abrió por primera vez, merece la pena entrar aunque sea a por unas aspirinas.
La Iglesia de San Olaf, fue de los edificios más altos del mundo de 1549 a 1635, cuando un rayo destruyó su aguja de más de 159 metros. Se puede subir a la torre, aunque os aviso que tienen una escalera muy estrecha y hay que pasar por 258 escalones, aunque podrás disfrutar de las vistas.
Por último no podemos dejar de visitar la Muralla de la ciudad baja, la parte más fotogénica es la que bordea la ciudad por el oeste, enlazando las nueve torres.
Kalamaja
Al noroeste del casco antiguo está Kalamaja, una zona que en su día se componía de casas destartaladas de madera y fabricas, hoy zona hipster de la ciudad con numerosos cafés y tiendas, incluso encontrarás la prisión de Paraei transformada.
En este barrio encontraréis el Museo Lennusadam, un museo de la historia marina de estonia, es cuanto menos curioso. La Ciudad Creativa de Telliskivi, es un conjunto de edificios de antiguas fabricas en desuso, que hoy componen la zona más alternativa de la ciudad donde podéis encontrar tiendas de todo tipo, cafés, bares con cerveza artesanal, foodtrucks, puestos y mercadillos callejeros, sin duda visita obligada.
Por último y si el tiempo lo permite, podéis visitar el Parque Kadriog, es un enorme parque a 2km del casco antiguo, mandado a construir por el Zar Pedro I, para su mujer Catalina la Grande. Kadriog, significa «el valle de Catalina» en estonio. Junto con el parque, el Zar mando construir el Palacio de Kadriog de estilo barroco que hoy alberga el Museo de Arte Kadriog.
Como consejo para una excursión adicional para aquellos que vayáis con más tiempo, deciros que Tallin (por cierto con acento fonético en la «a») está muy cerca de Helsinki, es más, podéis ir en un Barco en algo más dos horas y conocer la capital de Finlandia. Tallin es un lugar donde hay muchas segundas residencias de finlandeses adinerados.